Tengo ganas de llorar, dijo.
No quiero estar aquí,
necesito estar a tu lado,
me chupa un huevo todo
y tengo ganas de llorar.
Y lloró.
Lloró sin entender
bien el porqué.
Tengo ganas de llorar.
Se quedan cortos
los te quieros,
no encuentro las palabras
que con rigor expresen
la desazón que siento.
Tengo ganas de llorar.
De felicidad, de abandono,
de alegría y tristeza...
Porque te encontré
tengo ganas de llorar...
Y tus lágrimas llegan
donde las palabras
no alcanzan.
no alcanzan.
siempre el llanto que libera,
ResponderEliminaryo nunca supe porque¡¡¡¡¡¡
petons