lunes, 3 de mayo de 2010

Todo lo contrario

No es el color de tus labios,
ni la textura de tus ojos,
ni el tacto de tu voz,
ni la mirada de tus manos
lo que de ti prefiero,
ni lo que más me gusta.

Lo que en verdad me embriaga
son tus labios entre mis labios
transformando en amor
sendas texturas,
tu voz presa del gemido,
mi corazón rendido en tus manos,
tus ojos cuando me miran
y al oído me susurras
como tú me amas, te amo.

2 comentarios:

  1. Hermoso poema, palpables los sentidos, aún desfigurados. Me gusta.

    Un saludo Santi.

    Raül de Umlaut.

    ResponderEliminar
  2. Gracias, Raúl. Celebro que te guste. Un saludo

    ResponderEliminar